Intérpretes de lengua de signos
Estos profesionales igualan el proceso de comunicación entre personas sordas y oyentes. Facilitan el acceso a la información en LSE y lengua castellana. Contribuyen así a la independencia de la persona que puede decidir y actuar en igualdad de condiciones con todos los datos a su alcance. Cumplen un código ético de neutralidad, fidelidad y confidencialidad.
Sus espacios de actuación son dispares, pueden desarrollar su trabajo en ámbitos jurídicos, académicos –en todos los niveles educativos-, religiosos, en la televisión o durante conferencias o ponencias, entre otros.
Existen distintas modalidades de interpretación. La simultánea que sigue el ritmo de la intervención y es la más utilizada. La consecutiva, el intérprete espera a que termine cada frase para traducir. (Hacer su trabajo) Sin olvidar la interpretación al teléfono y de textos escritos.
Sinoguías
Las signoguías son unos dispositivos portátiles multimedia en formato PDA equipados con una pantalla para reproducir vídeo, textos y audios. Suelen utilizarse en Museos o exposiciones para acercar su contenido a personas sordas. Un intérprete signa en la pantalla y los subtítulos rubrican su mensaje. El usuario puede moverse con libertad por el espacio expositivo y disfrutar en igualdad de condiciones de las obras.
Avisadores luminosos
Las tecnologías adaptadas a personas sordas están basadas en señales visuales y sensoriales. Así podemos encontrar dispositivos para el hogar como transmisores o receptores portátiles que emiten distintas señales luminosas para diferenciar el sonido de la puerta o el teléfono. Amplificadores de bucle para interiores o teléfonos fijos con pantalla.
Actualmente existen bombillas smart con códigos de parpadeos y colores que identifican gran parte de los sonidos de una casa. Además dicha señal puede llegar a un dispositivo móvil o smartwatch.